The Authority
Ficción serializada creada por Warren Ellis y Bryan Hitch
Publicada por Wildstorm, sello editorial de DC Comics, de mayo de 1999 a julio de 2002
“This is what superhero comics would look like if they were produced by Jerry Bruckheimer and directed by Michael Bay, with a screenplay by crackheads. Me, Bryan Hitch, Paul Neary, Laura DePuy—for twelve issues, we *were* the fucking Beatles.”
— Warren Ellis.
1999 es, sin duda alguna, el último zeitgeist, el punto en el tiempo afectado tanto por la confluencia y demarcación paulatina de ideologías, radicalismos artísticos y trastornos significativos en las normativas socio y geo-políticas. El mundo nunca fue el mismo desde entonces.
Esa entrada al siglo XXI, ese cultural shift, permea y deja una herencia imborrable sobre todo lo que actualmente vivimos y pensamos. Como fan del micro-universo de los comics, percibimos también ese aire de cambio, donde la proliferación de propuestas left field fue erosionando y derribando esas reglas autoimpuestas sobre las cuales se mantenía erigido el mainstream.
Es en el 2000 cuando los controversiales Bill Jemas y Joe Quesada abolieron el reinado del fanboy y retaron a una generación naciente de guionistas a definir la visión sobre la cual Marvel Comics encaminaría a su plan de publicaciones. La compra del estudio WILDSTORM de Jim Lee por DC Comics en 1998 inicia una oleada de obras de autor que encontraron no solamente un nuevo foro para exponer su trabajo contracorriente y multigénero, sino que una obra de ellas en particular le daría una bofetada con guante blanco al consumidor, acostumbrado a la norma, al comic de robusta historia y personajes establecidos.
Con fecha de salida en mayo del ’99, The Authority sin lugar a dudas es la saga que da el paso de calidad dentro del género de superhéroes, y que intenta sutilmente girar las percepciones sobre el verdadero alcance que este género puede llegar a lograr. Inspirado notablemente por el ya mítico Miracleman de Moore, Warren Ellis rescata de sus páginas a su pirotecnia y brutalidad, así como a la franqueza para explorar excentricidades y manías, pero usando siempre su propio estilo: su ironía, su humor mordaz, siendo un approach MUY británico que se esconde bajo el andamiaje del comic americano, y que logra un refinamiento y perfección del “estilo Image” noventero, de esa escuela del exceso pero ahora bajo los parámetros de la cultura del blockbuster, que poco a poco venía amenazando con explotar en la conciencia de los amantes de lo pop. Bryan Hitch y el veterano Paul Neary le dan un ‘oomph’ al eficiente estilo de un siempre influyente Alan Davis, eliminando sus matices caricaturescos para catapultarlo hacia extremos del fotorrealismo propio de un Alex Ross, bajo escenarios y set pieces que parecen salidos de la mente de un Michael Bay o un Roland Emmerich.
The Authority apuesta por esa estética visual del “widescreen comix” que encontrábamos solamente en nuestros DVDs—y cuyo origen se atisba ligeramente en la ya inmortal saga de “Rock of Ages” de Grant Morrison en el comic de JLA—y que ahora irrumpe en el Noveno Arte de forma notoria, in your face, donde todas sus páginas bajo fondos negros se ven enriquecidos por un consciente y estilizado diseño cromático por Laura DePuy (ahora Martin), cuyo grado de expertise sin duda alguna le abrió las puertas al trabajo del colorista digital como un recurso no solamente importante sino crucial para aumentar la calidad de la narrativa gráfica contemporánea, y que en ese entonces se encontraba monopolizado por el difunto estudio Liquid! que hiciera historia en Marvel Comics a mediados de los noventas.
Todo este grandísimo talento es guiado por Ellis a través de agudísimos, urgentes, sensacionales y sumamente divertidos guiones en donde el propio autor se sumerge en sus ahora ya consagrados personajes, para imponer su muy peculiar voz autoral que se desvive por aplicar cantidades industriales de investigación al servicio de sus historias (siendo en su mayoría la teoría y adelantos tecnológicos y científicos), y por dotar a sus diálogos de un entrañable “optimismo cínico”, que desnuda lo terrible e incierto del mundo bajo una perspectiva 100% positivista y esperanzadora, no importando lo oscura y devastadora que sea la situación en la que se ven envueltos sus protagonistas.
Con un gran sentido de asombro, alto impacto e imponente escala, este equipo creativo despliega con gran maestría una efectiva manipulación de la audiencia para llevarla a creer verdaderamente que el mundo está en inminente peligro, ya sea bajo el cruel yugo de sádicos dictadores octogenarios, aristócratas expansionistas de mundos alternos y dioses abstractos al estilo Giger.
Los personajes que conforman a The Authority son glamorosos y de gran fuerza: JENNY SPARKS, SWIFT, JACK HAWKSMOOR, THE ENGINEER, APOLLO, MIDNIGHTER y THE DOCTOR poseen un atractivo porte que destruye el molde y presentación estándar de un superhéroe disfrazado. Con una personalidad repleta de ingenio, sagacidad y rudeza, pero con una genuina compasión por la raza humana y honor a toda prueba. Su actitud desinhibida contrasta con la tónica conservadora de los héroes de Marvel o DC, y rebasan por completo a los arquetipos que representan en su forma más básica.
El génesis de esta serie yace en otro comic escrito por Ellis: STORMWATCH, una serie de superhéroes paramilitares que combaten al mal y publicado por Wildstorm entre 1996 a 1998.
“I figured that if I was going to do a Superhero book I was going to do one that was as smart as I could make it. And quiet, and low-key, so the horror stood out more clearly. Book One of this story was STORMWATCH Vol. 1 issues 37-50. StormWatch was the United Nations’ Special Crisis Intervention Team, a huge organization built around a squad of superhuman field officers, all based upon a vast orbital platform called Skywatch. These were cold, twisted, bitter little stories of politics, conspiracy and a handful of people trying to save the world from itself.”
Ellis deconstruye paulatinamente a StormWatch, eliminando a personajes interesantes y carismáticos, para dar entrada al siguiente nivel, que es The Authority.
“And nobody bought it! So we put together Stormwatch volume 2. “Y’know, I want to keep it smart, but we’re going to try and make it a bit brighter, and move faster. Book Two was STORMWATCH Vol 2, which ran eleven issues. Freed from the mad tyranny of its previous commanding officer, StormWatch endeavored to become a more ethical unit, making a finer world. But the world got stranger and bigger, and finally, too large and big for StormWatch to survive in it.”
Tras el poco éxito de StormWatch (aclamado por la crítica especializada de comics, pero con bajas ventas en todo el período en que Ellis lo escribió), el autor decide reconceptualizar a este equipo, dándole un giro de 360 grados al género de superhéroes en el proceso:
“And then that didn’t work out either. So eventually I said “Let’s just throw out the clever stuff, and we’ll just have shit blowing up.” And all of the sudden, I’m a star! [Laughs] It really is, it’s Stormwatch freebased. This is, therefore, the third act in a larger story—and before you start coughing into your fist and sneaking out the side door, I’m telling you now that you won’t need the two previous stories to follow this one. Everything has changed—except for the one theme that runs through the whole damn thing. This is about making a better world. It may well BE a world that’s suddenly gone nuts, exploded into a widescreen two hundred million dollar fantasy of skies full of super-bastards… but these stories have always been about that thing that superhero stories never seem to get around to. Making the world a finer place than it was when they found it.
THE AUTHORITY moves across genres and settings with each new story, and needed an artist who could do the same. THE AUTHORITY came directly from my collaboration with Bryan Hitch on STORMWATCH and Bryan’s love of superheroes and spectacle. Working with Bryan was such a fine creative experience that, when I sort of killed STORMWATCH, we immediately started looking for ways to continue the working relationship. THE AUTHORITY is it; superheroes on the largest possible scale, the “team book” gone thoroughly berserk in widescreen.
The difference in THE AUTHORITY is simply that they simply have to beat up over a thousand people an issue to do it. And what’s wrong with that? This is THE AUTHORITY. Pay Allegiance. Or get your head kicked in.”
Con la libertad suficiente para salirse con la suya, Ellis hizo de The Authority un éxito comercial, catapultando a su carrera y la de sus colegas hacia el mainstream en forma definitiva. Con un producto de acción frenética y sin compromiso, fueron publicados 12 tomos con una cadencia cerebral para ejecutar un flujo narrativo de “acción-caracterización-acción”, que estuvo repleto de ideas muy originales, personajes con empatía sin igual, diálogos que hubieses deseado haberlos pensado primero y un arte secuencial que le otorgó una identidad única.
Ellis y compañía dejan a la serie en el año 2000, cediendo los derechos de publicación completamente a Wildstorm/DC Comics, la cual todavía y en mayor o menor medida continúa editando las aventuras de estos personajes. Mención honorífica la merece su sucesor, Mark Millar, quien radicalizó la idea original de la saga no solamente para presentar un paso evolutivo que fue completamente lógico, sino para imprimirle un sello distintivo que lo alejó por completo de una zona de confort y de la reiteración: el superhéroe como instrumento de cambio geopolítico y en conflicto directo con el aparato corporativista y el Complejo Militar-Industrial, dejando de lado las batallas tradicionales contra el “súper villano de la semana”. Con arte del inigualable Frank Quitely, la segunda etapa de The Authority se mantuvo como punta de lanza en la industria.
Desafortunadamente su controversial contenido fue sujeto a una implacable intervención editorial que dio al traste con los planes a largo plazo de Millar y su satírico y políticamente incorrecto storytelling. El comic concluye su tiraje en 2002, coincidiendo con la renuncia del autor en DC Comics, siendo una decisión que hasta el día de hoy ha sido definitiva, quemando puentes con esta casa editora para siempre.
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ADDENDUM
Propuesta original de la serie
The Authority/JLA: el comic que nunca viste
¿Qué haría Warren Ellis si algún día regresara a escribir el comic de The Authority?
Puedo asegurarte que la verdadera magia de THE AUTHORITY se encuentra en este primer volumen (29 tomos en su totalidad si contamos la obra conjunta de Ellis y Millar). Aún y cuando su grandeza se haya diluido en ediciones subsecuentes, siempre me he visto de regreso a este primer run. Los demás comics de superhéroes, aún atrapados en su interminable “segundo acto”, palidecen a comparación de este sensacional concepto.
“Property destruction on a massive scale. It’s a superhero book gone widescreen, it’s $200 million just on the special effects, it’s a Jerry Bruckheimer production with script by Sylvester Stallone, Cecil B. DeMille and Timothy Leary. It’s as big and mad and beautiful as Bryan Hitch and I can make it. If teenagers need superhero comics, then this is what they should be like—pure bloody adrenaline, strange days, and big things blowing up. And why not?”
— Warren Ellis.